HABLAR CON DIOS (29-10-2023)

A veces pensamos que ser creyente es muy difícil y que hay que saber muchas cosas y ser una persona muy especial para ser buen creyente.

Jesús nos demuestra que se puede ser muy buen creyente de forma muy sencilla. No es necesario ser muy complicado.

Amar a Dios totalmente y amar a los demás como a nosotros mismos.

No se puede resumir en tan pocas palabras algo tan grande y bueno como saber que somos hijos de Dios. A veces, las personas más sencillas nos dan las lecciones más grandes. Es de ellas de las que aprendemos muchas cosas.

Así que seamos generosos y buenos con los demás, no nos compliquemos la vida a nosotros mismos ni se la compliquemos a los demás. Eso es lo que nos pide Jesús.